Teatro Gran Rex

Con capacidad para 3.262 espectadores y una historia ligada a la modernidad arquitectónica y a los espectáculos de mayor despliegue, este coloso cultural es un símbolo de innovación, arte y vanguardia.

Desde su inauguración en 1937, el Gran Rex se consolidó como el teatro de los grandes espectáculos musicales. Por su escenario desfilaron artistas consagrados a nivel nacional e internacional, con puestas en escena que siguen asombrando por su despliegue técnico y artístico. 

Un hito del racionalismo argentino

Su edificio es un verdadero ícono de la arquitectura moderna argentina. Diseñado por el arquitecto Alberto Prebisch —el creador del Obelisco— junto al ingeniero civil Adolfo T. Moret, el edificio fue erigido en tiempo récord: apenas 7 meses. 

En una época donde los teatros aún evocaban la estética de los antiguos palacios europeos, este propuso una nueva mirada: formas simples, líneas puras y una funcionalidad que hablaba del futuro. Una gran superficie vidriada. por ejemplo, permitía entrever el interior del edificio desde la vereda, generando una continuidad visual inédita para su tiempo. Además, en el vestíbulo, se destacaba un sistema de altoparlantes que permitía a los espectadores llamar a sus coches, estacionados en una cocheras subterráneas. También contaba con un bar que se distribuía en 3 niveles, un bowling y billares en el subsuelo: una experiencia integral mucho antes de que ese concepto se volviera tendencia.

Diseño con visión de futuro

El interior del teatro replicó la misma lógica racionalista: austeridad ornamental, uso de materiales nobles y diseño funcional. La sala —asimétrica por el terreno irregular— está dispuesta como una gran cáscara dividida en bandas superpuestas, inspirada en el Radio City Music Hall de Nueva York. Los materiales utilizados, como el mármol Botticcino italiano, la madera enchapada y el bronce, dialogan con una paleta cromática de tonos tierra siena y ocres rojizos, presentes en butacas, alfombras y telones.

Un teatro con protección patrimonial

Por su valor arquitectónico e histórico, el Gran Rex fue declarado edificio protegido por la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos. 

Hoy sigue siendo una referencia ineludible para la escena musical y teatral argentina, y una usina de experiencias inolvidables.

Conocé los teatros de la Ciudad de Buenos Aires.