El Fortín es un emprendimiento familiar fundado por Don Perfecto Purdón, en 1962, y seguido por su hijo Sergio y su nieto Sebastián, quienes con el tiempo supieron transformarlo en un templo de la pizza de Buenos Aires. Hace muchos años que El Fortín pasó de ser una pizzería de barrio a transformarse en una pizzería de la ciudad: sus clientes llegan desde los cuatro puntos cardinales del mapa llevados por el boca a boca de que allí encontrarán una pizza al molde, alta y muy (muy) cargada de ingredientes. La torta de ricota es otra especialidad de la casa. Los fanáticos de los equipos de fútbol All Boys, Argentinos Juniors y Vélez Sarsfield se disputan a El Fortín como la pizzería oficial de sus respectivas hinchadas. En 2006, fue declarada como Sitio de Interés Cultural por la Legislatura porteña.