En el agradable barrio de Caballito hay un edificio muy especial en la esquina de Florencio Balcarce y Rivadavia, frente al Parque Rivadavia, o Lezica, según el decir de viejos vecinos. En el último piso del edificio, el quinto, vivió el notable escritor y poeta Conrado Nalé Roxlo (1898-1971). En la planta baja del inmueble, desde 1915 o 1920, siempre hubo un café. Originalmente fue El Pelícano. Luego, allí funcionó El Cóndor, obviamente frecuentado por Nalé, a quien en más de una oportunidad acompañaron Roberto Arlt y Antonio Berni.
Desde hace varios años el café hizo un trueque: El Coleccionista por El Cóndor. Su nombre homenajea a su importantísima clientela, en especial a la de los domingos a partir de las cuatro de la mañana: los coleccionistas de estampillas, monedas y medallas.
El arquitecto Aquilino González Podestá, presidente de la Junta de Estudios Históricos de Caballito y de la Asociación Amigos del Tranvía, verdadero personaje, declarado en el año 2003 Ciudadano Ilustre de la Ciudad por la Legislatura porteña, suele tomar un cafecito en El Coleccionista, uno de los pocos cafés que funcionan las 24 horas, ofreciendo siempre su tradicional hospitalidad. Los noctámbulos se lo agradecen.