Es reconocido en la ciudad por la jerarquía de sus barmen...
Desde 1988 se define como el lugar de “los mejores sándwiches de Buenos Aires”.
En el medio del céntrico hotel, un salón reúne esculturas de principios del siglo XX y terminaciones con molduras de estilo.
La familia Thibon se dedicaba al cultivo de la vid en su Francia natal y trajo a Buenos Aires en 1935 sus conocimientos sobre el tema.
La magia de una esquina centenaria.
Aquí fue donde el gran Homero Manzi, en una de sus mesas, escribió el tango Sur…
Esta tienda es una invitación a viajar en el tiempo y en el espacio.
Este edificio conserva algunos ladrillos de la época colonial, hechos con barro y paja secados a horno.
Perón entró al bar para probar el sandwich de pavita del que tanto le habían hablado.
Una buena opción para saborear un cafecito y disfrutar de una conversación con un amigo…