Un restaurante pequeño para paladares refinados.
Un hotel cinco estrellas que ofrece una parrilla al aire libre.
Una clásica parrilla porteña con platos abundantes y postres para golosos.
Obtuvo el puesto 21 de los “Mejores 50 Restaurantes de América Latina” en 2016.
Un histórico restaurante que abrió sucursales en otros barrios.
Su ubicación es un secreto a voces y hay que reservar porque siempre está llena.
Platos abundantes y mozos de oficio que saben orientar al cliente.
Casco Histórico, Retiro y la calle que nunca duerme.
Comer “de parado” los gustos más tradicionales.
Tiene porciones muy abundantes y precios lógicos.