Con su notable arquitectura, calles adoquinadas y cafés nostálgicos, Buenos Aires proporciona el entorno perfecto para muchas películas. Desde piezas audiovisuales de autor hasta éxitos de Hollywood, te compartimos un listado de títulos para disfrutar antes o después de viajar.
Comenzamos con Nueve reinas (2000), un drama criminal argentino aclamado internacionalmente sobre dos estafadores (Ricardo Darín y Gastón Pauls) que unen sus fuerzas para una gran estafa. La película funciona casi como una guía para conocer los barrios del centro de la ciudad, con muchas escenas rodadas en Puerto Madero, Montserrat, San Nicolás y Retiro, donde el par de impostores se reúne en el emblemático Kavanagh, el primer rascacielos de América del Sur. El bar que Ricardo Darín utiliza como su "oficina" es La Tasca de Fosforito (Hipólito Yrigoyen 1218), una antigua taberna famosa por sus platos abundantes.
La película más exitosa de la Argentina a nivel internacional en los últimos años, El secreto de sus ojos -ganó el Oscar a la mejor película extranjera en 2010-, fue filmada en su totalidad en Buenos Aires y sus alrededores. Las ubicaciones incluyen la estación de tren de Retiro y el Palacio de Justicia, pero el momento más dramático del film se da en una tensa persecución que tiene lugar en el estadio Tomás Ducó del Club Atlético Huracán. Con su distintiva torre de transmisión art decó, fue denominado “El Palacio” al momento de su inauguración por su lujosa infraestructura.
¿Se puede combinar baile con un thriller de acción? Robert Duvall se propuso lograrlo en Assassination Tango (2002), un proyecto personal del actor estadounidense para honrar su pasión por el tango. La película narra la historia de un asesino a sueldo que comienza a aprender a bailar tango de la mano de la actriz argentina Luciana Pedraza, su esposa en la vida real. Figuran escenas en la tradicional milonga Sin Rumbo en Villa Urquiza, espacio en donde el propio Duvall aprendió a bailar.
Luego de muchos idas y vueltas (y sobre todo mucha controversia), en 1996 el entonces presidente de la Argentina Carlos Menem autorizó que Madonna filmara en el balcón presidencial de la Casa Rosada la escena donde canta "No llores por mí, Argentina". La película de Alan Parker, inspirada en Evita, el éxito musical de Andrew Lloyd Webber, quedó inmortalizada desde entonces. Los turistas de Buenos Aires pueden salir a ese mismo balcón con las visitas guiadas que se ofrecen los sábados, domingos y feriados.
Con sus techos altos y mesas enormes, Centro Montañes, el restaurante de la comunidad cántabra en Colegiales, llamó la atención ya de varios directores. Por ejemplo, Juan José Campanella lo utilizó como el restaurante del personaje de Ricardo Darín en la exitosa comedia romántica El hijo de la novia (2001). El club fue fundado por inmigrantes cántabros en 1923 y ofrece actividades deportivas, culturales y una exquisita cocina española.
El director de El Padrino encontró el lugar perfecto para lanzar el drama Tetro (2008) en las calles empedradas de San Telmo y La Boca. El Bar Británico y la vecindad en donde vive el personaje de Vincent Gallo recrean un ambiente nostálgico a esta historia de rivalidad entre hermanos. Asimismo, Buenos Aires demuestra que siempre es una ciudad de contrastes con el drama policial Focus (2015), protagonizado por Will Smith y Margot Robbie, en donde se presenta a los barrios de La Boca, San Telmo, Barracas y Puerto Madero como modernos, sofisticados y cosmopolitas.
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