Conocida durante muchos años como la Torre de los Ingleses, la Torre Monumental fue construida en 1916 en el predio donde se hallaba la Usina de Gas de Retiro (distribuidora del combustible para el alumbrado público), en el barrio de Retiro.
A lo largo del siglo XX, el monumento se convirtió en fiel testigo del desarrollo urbano y de las distintas oleadas inmigratorias, que convirtieron a Retiro en una de las principales puertas de entrada a la Ciudad de Buenos Aires, a través de la estación Retiro del ferrocarril y del puerto de la ciudad. El Hotel de Inmigrantes, hoy convertido en museo, también es una visita cercana recomendable y testigo de esa época.
La Torre Monumental estuvo clausurada hasta su reapertura en el año 2001, cuando comenzó a funcionar como Centro de Informes de Museos, para orientar al público sobre la oferta de los distintos museos de la ciudad de Buenos Aires, con un servicio de atención personalizada y profesional, entrega de folletería y una tienda de recuerdos.
La torre tiene 60 metros de altura y cuenta con un mirador desde el que se observa el barrio de Retiro.