Ubicada a pocos metros del Parque de la Facultad de Agronomía de la ciudad de Buenos Aires. El barrio es arbolado y silencioso, y se destaca por respetar la ecología. Además de ser un lugar ideal para el descanso, también brinda un espacio para el baile: el Club Sunderland de Villa Urquiza, un clásico de los tangos y milongas de los años cuarenta, donde se puede bailar los sábados por la noche.
Decorada con piezas de alfarería y madera y con tejidos de culturas indígenas autóctonas de Argentina, la casa cuenta con un amplio jardín, en el que los huéspedes pueden disfrutar el desayuno cuando el clima lo permite.